Portada » Algo raro en tu mirada • Máximo Elí “MaXans”
Punto de Vista

Algo raro en tu mirada • Máximo Elí “MaXans”

Versión: 1

Te miro a los ojos,

vacíos, y flojos,

y noto algo, en tus iris rojos,

hay algo, que me deja en despojo.

Te apareces por las noches,

te manifiestas en mis visiones,

me atormentas en alucinaciones,

pero aún no dejo que me controles.

Sé que hay algo, que me quieres hacer,

sé que hay algo, que en mí quieres ver,

sé que hay algo, que no te deja ser,

se que hay algo, que te quema al anochecer.

Será la luz de la luna,

o la protección de mi cuna,

o mis rezos, en fortuna,

o palabras, de bendición alguna.

Sé, que no eres humana.

Sé, que esperas a que me pare de la cama.

Pero sé defenderme, y lo haré,

rezaré, gritaré, conjuraré,

lo que sea, pero ten en claro, que te alejaré.

Pues ya me paré, ¡Ahora enfréntame!

¡Susúrrame!

¡Grítame!

¡Maldíceme!

¡Témeme!

Esto que siento, no es apatía,

es valor, y armonía,

es dolor, y valentía,

siempre supe, que no resistirías.

Ahora mírame, en todo mi esplendor,

mi alma brilla, cual sol en fulgor,

mi voz resuena, cual grito de dolor,

mi mente exorciza, cual suplicio de amor.

Sé que no puedes hacer nada,

pues soy un ser, de alma alada,

un humano que clama,

que su voluntad, ya está dictada.

Demonios como tú no merecen vivir,

y menos en mi presencia, me logré redimir,

hoy te avisté, y miedo no me hiciste sentir,

mis simples palabras, te hicieron ir.

Pues ya no te tengo miedo,

solo basta con rezar un Credo,

eso sirve, para alejarte, y al pecado,

estoy orgulloso, de ya no sentirme aterrado.

Es la primera vez que te escribo,

pero no lo hago para bien,

lo hago, para demostrarte que aquí, yo rijo,

sobre tus tierras, declaro un amén.

Sobre esto, ya hay paz en mi mente.

Solo eres un alma perdida, un simple ente.

Esto no es algo ligero, realmente,

te estoy tomando en serio, maldita demente.

Quizás la gente me vea como un loco,

y quizás mi cordura está afectada, un poco,

sé que no me equivoco,

la verdad, yo evoco,

y la sentencia final, invoco:

Jamás podrás hacerme nada,

pues yo desafío tus leyes,

nunca me rendiré ante tu fe desalmada,

pues yo creo en otros reyes,

tu intención de daño, siempre se palpaba,

ahora, quiero que te entregues,

quiero que te rindas, con la consciencia calmada,

quiero que te arrodilles,

y aceptes la paz, y escuches la santa llamada,

quiero que los ojos cierres,

y pienses;

que no soy un ser inmortal, ni un alma atrapada,

solo soy un mortal, que quiere que lo escuches,

si quieres seguir visitando este reino de tierra amada,

tendrás que ser perdonada, eso si lo quieres,

pues de lo contrario, habrá dolor en tu mente limitada,

seguirás atrapada, encadenada,

¿Acaso te lo mereces?

Quizás sí, quizás no.

Pero yo sé que ahora estás confundida,

sé que no me perdonarías la vida,

pero recuerda, aún sigues amarrada,

dolida, y atrapada,

aunque acabo de notar,

que hay algo raro, en tu mirada…