“¿Mejores partidos? Claro que sí. ¿Mejores políticos? Por supuesto. Pero para eso hacen falta ciudadanos comprometidos, que hagan algo más que quejarse en Twitter o en la barra del bar
Ignacio Escolar (1975-¿?), periodista español.
Alzar la mano para aparecer en una boleta electoral, tiene sus consecuencias: entre ellas perder la vida privada. Ya sabemos que estos tenores no son del ámbito democrático, pero en casa del jabonero el que no cae resbala. El chisme incluso es una necesidad evolutiva del hombre; por lo tanto, es importante que nuestros personajes a participar dejen de morderse los labios por lo que se dice de ellos. En tiempo de elecciones, todos agarran parejo; verdades o mentiras, se vuelven el café de domingo…
Sin embargo, sería prudente que para salir a votar este 2 de junio no veamos la vida privada de quienes nos quieren gobernar, tampoco veamos la clase social a la que pertenecen, sino que hagamos un ejercicio honesto sobre estos siguientes tópicos:
1.- Están preparados para garantizar la seguridad de nuestro municipio, 7 de cada 10 mexicanos quiere gobernantes que sepan “pactar” un municipio seguro.
2.- Están capacitados para ejercer un desempeño público, y que los programas que el Estado y nivel Federal ofrezcan lleguen a los municipios, 3 de cada 10 mexicanos no tiene credibilidad sobre la buena gestión de los políticos actuales.
3.- Están diseñados para ser parte del sistema y no ahogarse en éste, las alcaldías que dicen “renovarse” se pierden en el tiempo, porque los come el gasto corriente y no hacen nada relevante.
Si partimos de estos tres ejes, la vida privada sólo nos dará un contexto sobre la preparación de quienes nos buscan representar, los estereotipos de hijo de papi, porque tiene dinero, se lo merecía porque ha picado piedra, ya le tocaba, tienen que salir del panorama, para ahora sí demostrar que esos personajes sabrán beneficiar al pueblo. Recuerden que es una filosofía organizacional llamada “ganar-ganar”. Aquellos que compraron su regiduría o su puesto para la administración, deberán demostrar que saben hacer lo que quieren hacer… y nosotros observemos ese panorama con claridad. Chisme evolutivo no ayuda.
María Velázquez Dorantes
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